Después del verano, es normal que tanto la piel como el cabello necesiten un
cuidado extra. El sol, el aire acondicionado, el calor, el sudor, y la exposición a
productos químicos como el cloro de la piscina, los protectores solares o la sal del mar, pueden dejar nuestra piel deshidratada y nuestro cabello frágil y sin brillo.
Además nuestros hábitos cambian en verano: la alimentación es diferente, comemos más en la calle, tomamos más snacks, y bebemos más alcohol.
En este artículo, encontrarás una serie de claves para recuperar la salud de tu piel y cabello, ahora que ha terminado el verano.
Cómo cuidar el cabello después del verano
El cabello puede sufrir durante el verano, porque las temperaturas suben y nuestras rutinas cambian. Es habitual, mojarlo varias veces al día, incluso hacernos recogidos con pelo mojado que a la larga va dejando nuestro cabello seco, frágil y sin vida. Por suerte, no es difícil mimarlo para devolverle su salud natural:
- Utiliza champús suaves y libres de parabenes: Elige champús que sean
hidratantes y sin sulfatos para evitar que tu cabello se reseque aún más.
Agentes hidratantes y reparadores como el aceite de oliva, la avena, el árbol del té o el aloe vera. - Aplicar semanalmente una mascarilla nutritiva de aceite: Si nuestro pelo
está muy deteriorado y presenta mucha sequedad, reserva un ratito cada fin de semana para regenerar tu melena, aplicando una mascarilla natural de algún aceite nutritivo como el de aguacate, macadamia, coco o jojoba. Estas mascarillas son ideales después del verano, ya que penetran en la fibra capilar reparando profundamente nuestro cabello y restaurando su brillo. - Evita el uso excesivo de calor: La vuelta del verano al trabajo, suele significar también volver a usar secador, plancha o rizador de pelo. Si necesitas secarte el pelo, utiliza mejor la opción de aire frío de esta manera protegerás las cutículas del pelo, que se abren por un exceso de calor, y minimizarás el daño.
- Sanea las puntas a la vuelta de las vacaciones y desenreda con cuidado: Cortar las puntas más castigadas, es un clásico en el cuidado del cabello después del verano, pero además es recomendable utilizar peines de dientes anchos y cepillos suaves para evitar la rotura del cabello. Peina tu cabello antes del lavado mientras aún está seco o después cuando aún está ligeramente húmedo, y evita recogidos muy apretados cuando está mojado.
- Retoma tus hábitos de vida saludable: Alimentación natural y de temporada, ejercicio físico, buen descanso, gestión de estrés, hidratación adecuada y adelántate al otoño con un complemento como hair nutrients que incluya todos los nutrientes que te ayuden a mantener tu cabello fuerte y saludable.
Cómo regenerar la piel dañada por el sol
La piel necesita un cuidado especial después del verano, no sólo por la exposición solar, sino también por haber estado expuesta a numerosos agentes oxidantes, para recuperarse y mantenerse saludable, el autocuidado de la piel requiere como mínimo de estos pasos:
1. Limpieza suave y efectiva: Usa limpiadores faciales suaves que no contengan sulfatos ni parabenos, y que ayuden a mantener la barrera cutánea bien protegida.
2. Incluye colágeno en tu día: Te ayudará a reparar la piel desde el interior y a
prepararla para el otoño. Para que realmente sea eficaz, busca un colágeno
hidrolizado que además venga acompañado con vitamina C y otros
antioxidantes para garantizar un mejor resultado.
3. Hidratación intensa: Aplica cremas hidratantes que contengan ácido
hialurónico, ceramidas y aceites naturales como el de rosa mosqueta o el de
caléndula. Los sérums también son excelentes para proporcionar un extra de
hidratación y nutrición.
4. Mejora tu circulación con la ayuda de ingredientes antioxidantes: Incorpora productos que contengan antioxidantes específicos para mejorar tu salud circulatoria como vein complex. No olvides que una buena circulación es sinónimo de unas “buenas autopistas” por las que circulen nutrientes que ayuden a reparar la piel.
5. Consume más alimentos anaranjados: No olvides que estos alimentos
contienen betacaroteno, un nutriente esencial para la regeneración de nuestra
piel y mucosas. Incorporar cada día, zanahorias, calabazas, boniatos o huevos, ayudará a que nuestra piel tenga la materia prima necesaria para regenerarse tras un verano de sirena. Si estos alimentos además se consumen frescos junto a una ensalada o en forma de sopa, y se acompañan de omega 3 u omega 7, sumarán en hidratación y nuestra piel lo agradecerá.
Recuperar la salud de tu piel y cabello después del verano es posible con constancia y estrategia. Estos cuidados sencillos junto a los productos adecuados, resultarán más que efectivos para volver a nuestras rutinas post verano, con una piel radiante y un cabello brillante.
Cuida tu piel y cabello durante todo el año y disfruta de una belleza saludable y radiante en cualquier momento.
En colaboración con Woments.