En nuestro camino hacia un estilo de vida saludable, los superalimentos han emergido como protagonistas por sus potenciales beneficios para la salud.
¿Qué son los superalimentos?
Los superalimentos son sustancias naturales ricas en nutrientes especialmente beneficiosos para nuestro bienestar. Destacan por su alta concentración en vitaminas, minerales, antioxidantes, fibra y otras sustancias bioactivas, siendo así grandes aliados en la prevención de las enfermedades y en la promoción de un mejor estado de salud.
Normalmente incluyen este grupo ciertas frutas, verduras, semillas, algas y hierbas… siempre que cumplan como estándar no sólo proporcionar nutrientes esenciales, si no también poseer propiedades antiinflamatorias, apoyar la salud cardiovascular, el sistema inmune, o incluso mejorar la función cerebral.
Los 6 superalimentos que debes conocer
Vamos a destacar varios superalimentos ampliamente reconocidos por sus beneficios desde un punto de vista nutricional:
En primer lugar hablaremos del grupo de las algas. En él encontramos varios superalimentos gracias a su poder detox, siendo especialmente útiles en la eliminación de toxinas y metales pesados del cuerpo.
La chlorella es bien conocida por ser rica en proteínas, vitaminas del grupo B, especialmente B12, minerales como el hierro, zinc, magnesio y calcio, antioxidantes como la luteína o la zeaxantina, y clorofila, activo útil por sus propiedades desintoxicantes.
Por otra parte, la espirulina tiene las mismas características que la chlorella pero, además, es rica en ácidos grasos esenciales como el gamma - linolénico, y en ficocianina, una sustancia antioxidante y antiinflamatoria que le da ese característico color azul.

En el grupo de las semillas destacamos el psyllium, considerado un buen superalimento por su excepcional perfil de fibra soluble, crucial para la salud digestiva, siendo útil en el buen tránsito intestinal y en la mejora de la consistencia de las heces. Puedes encontrarlo específicamente sin gluten, siendo así apto para celiacos.
Del mismo modo, el verde de trigo, también conocido como hierba de trigo, tiene un gran valor nutritivo y mineral. Es buena fuente de nutrientes de fácil absorción, vitaminas del complejo B, C, E, y K, betacarotenos, minerales como el magnesio, calcio, potasio, azufre, flúor, silicio, zinc y manganeso. Incluso puede llegar a contener hasta un 70% de clorofila.
En cuanto a frutas y verduras, destacamos el açaí, al ser rico en antocianinas, útiles en la prevención del estrés oxidativo, fibra y grasas saludables. Además, también debemos mencionar la col rizada, extremadamente nutritiva y rica en vitaminas A, C y K, y minerales como el hierro y el calcio, antioxidantes y fibra.
Ya por último, la levadura nutricional es un alimento en polvo a base de levadura inactiva (Saccharomyces cerevisiae) que posee un alto contenido en fibra, proteínas (constituyen aproximadamente el 40-50% de su peso en seco) y vitamina B12, esencial para la salud del sistema nervioso y la producción de glóbulos rojos.
También contiene minerales como el zinc, selenio, hierro y magnesio, esenciales para reforzar la salud inmunológica y la producción de energía.
Beneficios de los superalimentos
Como ya comentamos al inicio del artículo, consumir superalimentos, dentro de un contexto de alimentación saludable y nutritiva, nos ofrece variedad de beneficios adicionales para la salud, gracias a los compuestos bioactivos que contienen.
Por un lado, tienen una alta densidad nutricional al estar cargados de vitaminas, minerales, antioxidantes y otros nutrientes esenciales en concentraciones más elevadas que las presentes en alimentos comunes.
Son grandes aliados en la mejora de la salud digestiva debido a su contenido en fibra, como sucede en el caso del psyllium y las algas, ayudándonos así a promover una digestión saludable y regular.
Algunos como la espirulina y el verde de trigo apoyan el sistema inmunológico. Esto se debe a su concentración en vitaminas, minerales y antioxidantes, siendo útiles en la mejora de las respuestas del organismo ante las infecciones.
Por último, tienen propiedades antioxidantes y protegen nuestras células del daño causado por los radicales libres, ayudando a prevenir el envejecimiento prematuro, aspecto de gran importancia para la prevención de las patologías crónicas asociadas a la edad.
¿Cómo puedes tomarlos?
En el caso de frutas como el açaí, una forma sencilla de consumirlas es en forma de bowls con frutos secos y semillas. Te dejo una idea: Tritura 1 taza de pulpa de açai, junto con un plátano maduro, media taza de arándanos, 1/4 de taza de bebida de avena y una cucharada de semillas de chia. Acompaña con fruta por encima, una cucharadita de crema de almendras, un poco de coco rallado, y ya lo tienes listo para comer.
Las algas puedes introducirlas en el desayuno para maximizar sus beneficios nutricionales. Una idea práctica para integrarlo es hacer batidos verdes con espirulina, chlorella o polvo verde de trigo, combinando con frutas frescas y kéfir, para así añadir pre y probióticos. O incluso añadir una cucharadita al elaborar hummus.
En cuanto a la levadura nutricional, puedes incorporarla en tus sopas, guisos o salsas como el pesto para además añadir un toque de sabor a queso. Aquí tienes una receta de pesto vegetal: Tritura 2 tazas de albahaca fresca, media de nueces, 1/4 taza de levadura nutricional, 2 dientes de ajo, media taza de AOVE, el jugo de medio limón y sal al gusto.
Como has visto, incluir superalimentos en un contexto de dieta saludable puede ser una herramienta valiosa para optimizar nuestra salud.
¿Conocías alguno de los mencionados?
En colaboración con El Granero Integral.