Nutritivo
¿Sabías que tu piel y tu cabello también necesitan “comer”? Al ser tejidos vivos que están en constante regeneración, son muy sensibles a la falta de los diferentes nutrientes que necesitan para funcionar las células que los componen. Cuando estos nutrientes no llegan en las cantidades adecuadas, el resultado es una piel y cabello apagados, secos y frágiles.
¿Sabías que tu piel y tu cabello también necesitan “comer”? Al ser tejidos vivos que están en constante regeneración, son muy sensibles a la falta de los diferentes nutrientes que necesitan para funcionar las células que los componen. Cuando estos nutrientes no llegan en las cantidades adecuadas, el resultado es una piel y cabello apagados, secos y frágiles.
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¿Sabías que tu piel y tu cabello también necesitan “comer”? Al ser tejidos vivos que están en constante regeneración, son muy sensibles a la falta de los diferentes nutrientes que necesitan para funcionar las células que los componen. Cuando estos nutrientes no llegan en las cantidades adecuadas, el resultado es una piel y cabello apagados, secos y frágiles.
Tratamientos nutritivos para la piel
La piel seca o debilitada requiere productos nutritivos que aporten los nutrientes que no recibe. Por ejemplo, una crema de manos nutritiva con manteca de karité, aceite de jojoba o rosa mosqueta ayuda a regenerar la piel castigada por el lavado de manos, el frío, etc.
Para la cara, es recomendable usar una crema facial nutritiva con componentes como el resveratrol o el ácido hialurónico, que además de nutrición aportan firmeza y luminosidad. Finalmente, en áreas especialmente delicadas puedes usar productos específicos como un contorno de ojos nutritivo que no irrita la piel.
Tratamientos nutritivos para el pelo
Al igual que la piel, el pelo también necesita cuidados específicos para lucir en todo su esplendor. Un champú nutritivo con árbol del té, ortiga, levadura de cerveza o manzanilla nutre el cabello de la raíz a la punta en cada lavado. Posteriormente, puedes aplicar un acondicionador nutritivo con extracto de cebolla o una mascarilla capilar con aloe vera y enebro. Estos tratamientos nutritivos para el pelo restauran su equilibrio natural y reparan los efectos de las agresiones, además de tener un eficaz efecto en el crecimiento capilar.
También existen tratamientos nutritivos específicos para las pestañas con aceite de ricino, que las reparan y refuerzan para evitar su caída y hacer que luzcan siempre geniales.
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